Usted ya debe haber percibido cómo las pequeñas y grandes
transformaciones han ocurrido con la revolución digital. Desde pagar las
cuentas sin necesidad de colocar los pies en la agencia hasta personas que ni
siquiera saben lo que es una videocasete o ni usan más sus aparatos de DVD.
Poco a poco, esos cambios moldean el futuro en la sociedad. Pero usted ya ha
parado para pensar cómo las transformaciones digitales van a afectar la muerte?
¿Qué? ¿La muerte? Sí, ella misma. Todavía es un tabú aquí en Latinoamérica,
al menos, hablar más abiertamente sobre la muerte. Especialmente sobre cómo
lidiamos con ella y la aceptamos. De cualquier forma, en todo el mundo ya se están
creando conceptos sobre el "futuro de la muerte" y productos para
digitalizar los procedimientos vinculados a ella.
¿Cómo vamos a lidiar con la muerte y nuestra información en el futuro?
Un ejemplo de digitalización de la muerte es el sitio
Forever Missed, un memorial en línea donde dejar mensajes de cariño para un ser
querido que falleció y hasta encender velas virtuales. El Digital Legacy
fabrica placas con QR code para sepulturas que contienen una página con datos
del fallecido, fotos e incluso audio y vídeo.
Por extraño e inusual que parezca, responda una cosa:
¿cuántas personas ya fallecidas que usted conoce todavía poseen páginas activas
en redes sociales, por ejemplo? La tecnología hizo que la muerte cambiara en
nuestra convivencia. Es como si la memoria pudiera materializarse con más
facilidad, sólo que en formato virtual.
El cementerio del futuro es de alta tecnología
Hablando en materia, en el memorial futurista Ruriden, en
Tokio, en Japón, hay restos mortales esparcidos por las paredes en urnas de
cristal en el formato del Buda. El mausoleo ultramoderno tiene más de 2 mil
pequeños altares con cenizas de los muertos. Las coloridas luces de LED
ciertamente hacen que los visitantes se olviden por un momento que están en un
memorial, y no en una exposición de arte tecnológico.
La cremación es una tendencia que debe aumentar en el
futuro. En los Estados Unidos, en 2015, más personas fueron cremadas que
enterradas, según la NFDA (National Funeral Directors Association).
El más allá digital
Pensando en la cantidad de información que las personas
dejan por internet después de la muerte, la empresa Digital Beyond se ofrece para
organizar esa información. Entre los servicios están el cierre de cuentas en
las redes sociales, emails y tomar providencias sobre servicios digitales según
lo solicitado por el cliente.
Otros servicios le permiten grabar un mensaje a sus amigos y
familiares para que reciban cuando ya no esté aquí. Miedo? Pero esas son sólo
algunas de las transformaciones que vamos a presenciar cuando hablamos sobre el
futuro de nuestra memoria.
¿Será que en el futuro ir al cementerio como conocemos hoy
va a ser tan remoto como escribir una carta en vez de enviar un mensaje
electrónico?